Espacio de divulgación académico-científica en el área de Educación Superior dirigido por Dr. Fernando Pablo Nápoli
El jueves pasado marchamos con toda la comunidad de la Facultad Regional de la UTN, para encontrarnos con la gran comunidad de todas las universidades públicas , autoridades de gestión, docentes, estudiantes, no docentes, graduados, todos mancomunados bajo el estandarte de la defensa de la educación pública.
Bajo las columnas de lluvia, colmada estaba la plaza de mayo, la avenida de mayo, el congreso de la nación, cientos de miles entonando los cánticos más puros y verdaderos emanados de la garganta universitaria.
La caminata fue larga, pero leve, gracias al aliento de la ciudadanía que apoya, valora y respeta a la universidad pública, la sabe inclusiva, transformadora y guardiana incansable de la democracia.
Afirmar que la marcha fue una demostración de fuerza contra las políticas neoliberales, salvajes y destructivas que lleva adelante un gobierno de ricos para ricos, es minimizar la marcha, no se trata solo de reclamos presupuestarios, se trata de poner en agenda todo lo que la universidad tiene para ofrecerle a la sociedad, de la cual somos parte con un alto grado de responsabilidades.
Es mucho más lo que siempre plantea la comunidad universitaria cuando gana la calle, y el jueves la ganamos, con convicciones de una patria más justa, libre y soberana.
Marchamos para celebrar la vida universitaria, el conocimiento científico tecnológico y la transferencia hacia la sociedad, para celebrar el cogobierno y la libertad de ideas, para celebrar la inclusión social y volver a reafirmar que la academia no transa con los poderosos que pretenden someter la patria, estando siempre a favor de las elites autóctonas y foráneas.
Marchamos porque está en nuestra propia naturaleza como organización universitaria, construir una sociedad con verdadero rostro humano.
Siempre haciendo valer nuestros derechos y deberes como trabajadores de la educación.